¡Hola! Soy Susana de Elite, y hoy vengo con un tema que sé que te interesa si quieres que tus peques aprendan inglés (o cualquier idioma) casi sin darse cuenta: las mejores herramientas para que lo consigan.

Spoiler: no necesitas llenarles de deberes ni meterles en clases aburridas. De hecho, cuanto más divertido lo hagas, ¡mejor lo interiorizarán! Vamos a ver algunas ideas que funcionan de verdad.

1. Juegos y apps educativas: aprender jugando (de verdad)

No es ningún secreto: los niños aprenden mejor cuando se divierten. Por eso, las apps de aprendizaje de idiomas están en el top de nuestras herramientas favoritas.

Algunas que funcionan muy bien son:

  • Duolingo Kids: frases útiles, juegos rápidos y progresos visuales que motivan. 
  • Lingokids: ideal para niños pequeños, con canciones, vídeos y juegos interactivos. 
  • Fun English: otra joyita para que los peques vayan pillando vocabulario y estructuras básicas mientras juegan. 

Tip extra: No dejes que lo vean como «deberes». Plantea las apps como un juego más del día, ¡y verás cómo se enganchan!

Por cierto, si quieres un extra, puedes echarle un vistazo a nuestros cursos de inglés para peques en Esparreguera, donde todo es aprender jugando, pero con profe de carne y hueso.

También tenemos para no tan peques: más info aqui

2. Canciones, cuentos y vídeos… ¡en inglés, claro!

El poder de las canciones infantiles no tiene rival. Desde clásicos como «The wheels on the bus» hasta historias animadas en YouTube Kids, sumergir a tus hijos en el idioma sin presiones es una estrategia ganadora.

3. Flashcards y material físico: el clásico que nunca falla

Sí, las flashcards siguen funcionando. Palabras, imágenes y colores. A los peques les encanta.

Crea pequeños retos con tarjetas de vocabulario o monta mini juegos en casa: adivinanzas, memory, carreras para buscar objetos… ¡lo que se te ocurra!

4. ¿La mejor herramienta de todas? La inmersión real

Aquí no me enrollo mucho: no hay app, vídeo o juego que iguale a una experiencia de inmersión real en inglés.

Por eso, si de verdad quieres que este verano tu peque avance a pasos agigantados, te recomiendo que eches un vistazo a nuestro CAMPUS DE VERANO EN ESPARREGUERA.

Campus de verano

Son algo más de  cuatro semanas de actividades al aire libre, juegos, talleres… y todo 100% en inglés. Monitores nativos y bilingües que hacen que aprender no sea una obligación, sino la mejor parte del verano. ¡Y ojo! En grupos reducidos, porque aquí cada niño cuenta.

5. Cursos presenciales en grupos reducidos

Un niño necesita reír, equivocarse, preguntar y responder… con personas de verdad.

Por eso en Elite apostamos por grupos pequeñitos y clases muy personalizadas. Porque el idioma se aprende viviéndolo, no memorizándolo.

6. No olvides el ingrediente más importante: tu actitud

Los niños son esponjas, sí, pero lo que ven en casa les impacta más de lo que imaginas.

Así que anímate a usar palabritas en inglés en casa, cantar alguna canción juntos, ver dibujos en versión original, o incluso hacer alguna receta de cocina fácil con tu peque. No se trata de hacerlo perfecto, sino de dar el ejemplo de que el inglés (o el idioma que sea) es parte natural del día a día.

Hoy en día tienes mil herramientas a tu disposición para que tu peque aprenda idiomas de forma divertida y natural.
Pero si quieres darle el empujón definitivo (y asegurarte de que no pierdan el interés por el camino), en Elite estamos más que preparados para acompañaros en el proceso.

¿Te animas a descubrir todo lo que podemos hacer por tus peques?
Visita nuestra web y empieza a abrir puertas con el inglés.

¡Nos vemos!

Elite Formación
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